Termina teniendo experiencias sexuales con su compañero de trabajo
Él lleva mucho rato intentando seducirla. Son compañeros de trabajo y todos los días tienen que estar al menos ocho horas juntos. Todos los días su cabeza casi explota con todos los pensamientos y fantasías que se le vienen a la mente cuando la ve. Quiere hacerle mil cosas, pero ella siempre lo frena porque es una mujer casada.
Una mamada no es infidelidad
Todos los días le lleva regalitos, o alguna nota especial. Ella se sonroja, por dentro ella también tiene deseos de devorárselo pero no es capaz de traicionar a su marido. Por eso termina ignorando las propuestas de su compañero de trabajo. Ama el sexo, pero su marido en los últimos meses ha estado muy flojo, siempre llega cansado y no tiene ganas para follar. En una fiesta con compañeros de trabajo, luego de unas copas, se le viene un pensamiento revelador a la cabeza: Una mamada no es infidelidad
Le pide que se desnude rápido y cierre los ojos
Se acerca hacia su compañero que también estaba disfrutando de la fiesta y le dice al oído: sígueme. Suben las escaleras y se meten en una habitación vacía. Le pide que se desnude rápido y cierre los ojos. Él no se lo podía creer, pero al mismo tiempo hacía caso a lo que ella le había pedido, se desnudó y se echó en la cama. Al rato la tenía encima, desnuda, dándole la mejor mamada de su vida.
- Duracion 3:44
- Categorias SEXO ORAL